jueves, 23 de enero de 2014

Fuera del Actor

Fuera del Actor

En el teatro son esenciales tanto los aspectos del actor como aquellos externos que influyen en el montaje de la obra. Entre ellos, analizaremos el espacio escénico (accesorios, decorado e iluminación), y los efectos sonoros (música y sonidos).

Nuestra obra tendrá como escenario un escritorio, la cama de la Señora con su respectiva mesita de noche, y un perchero para colgar los vestidos de la Señora. Esto estará posicionado como un triángulo en el cenital central para dar la idea de conflicto en las escenas que la obra lo amerite. Se logra crear un juego visual porque al ser dos criadas y la señora, serían tres personajes en total que estarán en los tres diferentes lugares del cuarto. El objetivo es que el escenario esté equilibrado, y se logre jugar con las luces y las posiciones.

Básicamente, en el escritorio estará el teléfono de época (importante objeto revelador), un jarrón con flores, algunos papeles para ordenar, los cigarros, y el yesquero de la Señora. Aquí habrá una silla en donde la Señora y Clara se sentarán en diferentes momentos. En el medio, en la mesita de noche estará el despertador (otro objeto revelador), y la cama con su respectiva colcha para que las criadas puedan arreglarla y estirarla. Por último, en el perchero estarán los vestidos y bufandas de la Señora. Jugaremos con los colores blanco y rojo para demostrar el poder de la Señora y contrastarlo con el negro (que es el uniforme de las criadas).

En cuanto a la iluminación, la obra empezará con Solange barriendo justo en el cenital izquierdo. Luego de unos segundos, se prenderá el cenital derecho en donde estará Clara y empezará con sus líneas. Como somos el primer grupo, esto permitirá que los tramoyistas tengan tiempo de arreglar el escenario. Básicamente se utilizará la luz del cenital central para la iluminación del escenario. En los momentos de tensión, las criadas discutirán en el proscenio para captar más protagonismo, resistencia, y que se les visualice más el rostro. La luz frontal se usará durante toda la obra con mayor o menor intensidad para que los rostros faciales puedan notarse con claridad. Además, dará la impresión de algo tétrico en las muertes. Al final, se pondrán las luces LED para demostrar que se llevan a Solange presa. Lo ideal sería que fueran de color azul y rojo como las sirenas de la policía.  

En cuanto a los sonidos, la obra va a empezar con una música de Piaf llamada "Je Ne Regrette Ríen" (Sin Arrepentimientos) mientras Solange barre con el fin de entrar en la época y vida francesa. La canción es movida y tiene mucho canto. Sonará hasta que Clara empieza a hablar. No usaremos más canciones en toda la obra. Tendremos un sonido de época para cuando suena el despertador, y otro sonido de teléfono viejo para cuando el señor llama. Estos dos momentos son esenciales porque rompen o interrumpen con el juego de las criadas. Por último, se debería escuchar un portazo cuando la señora sale, y pensamos que lo haremos con alguna puerta de atrás porque los sonidos de puerta que hemos encontrado son bastante falsos.


Todos los detalles mencionados son tan importantes como los diálogos, la expresión corporal, y las apariencias de las actrices porque forman un conjunto necesario para que el montaje de la obra sea limpio, entendible, y agradable para el público. 

domingo, 12 de enero de 2014

Apariencias Exteriores del Actor

Maquillaje, Peinado y Traje

“El espectáculo teatral emplea tanto la palabra como sistemas de significación no lingüísticos. Recurre tanto a signos auditivos como visuales” Tadeusz Kowzan

En una representación teatral, se emplean infinidades de signos visuales; entre ellos el aspecto exterior del actor: peinado, maquillaje y traje. Este es de suma importancia dado que complementan y le dan sentido a la obra de teatro.

La apariencia de un actor, expresa una gran cantidad de información sin necesidad de recurrir al  diálogo o bien para remarcarlo. Los colores, las longitudes y la intensidad del vestuario y maquillaje son utilizados como pistas para identificar ciertos aspectos de los personajes que pueden o no estar planteados en el guión, como por ejemplo: su edad, estado de ánimo y mental, clase social, hábitos, estilo, personalidad, etc.
La propuesta exterior de la obra teatral “Las Criadas” se divide en sus tres personajes principales:

Las Criadas por ser personajes negativos, envidiosos y perturbados llevaran en su vestuario y maquillaje, una paleta de colores oscuros, fríos y opacos, principalmente negro como símbolo de silencio, austeridad, misterio, aislamiento y soledad.
En el caso de Clara, la criada que actúa como la señora en el ritual, tiene tres cambios de ropa:
  • El primero será ropa interior ambientada en la época, consiste en un vestido blanco ligero con un corset encima y sin zapatos.
  • El segundo cambio contiene los zapatos de tacón negro que Clara le exige a su hermana y un vestido rojo cuello en v que pertenece a La Señora. El rojo es un símbolo de pasión, rebeldía, ambición, envidia, rabia, peligro y crueldad; mezclado con negro sugiere dolor, tiranía y dominio.
  • Como último cambio para el personaje, Clara usará su uniforme de criada, que consiste en un vestido negro de mangas cortas, unas zapatillas negras sin tacón y un delantal blanco.
                Vestuario 1                 Vestuario 2                         Vestuario 3
Distintas opciones de zapatillas

En el caso de Solange, ella permanece durante toda la obra con su uniforme de criada,utiliza un vestido negro, zapatillas y delantal, con la diferencia de su falda es mas larga y durante varios momentos de la obra recurre a unos guantes de limpieza amarillos.


Vestuario único 
Guantes de fregar
El cabello de las criadas estará trenzado y recogido, para facilitarles el trabajo doméstico y como un símbolo de sumisión.
Ya que las criadas tienen distintos cortes de cabello, para Solange se propone una trenza que rodee la coronilla; en el caso de Clara que tiene el cabello corto, se propone una trenza lateral, que le retire el cabello de la cara.

    Clara                 Solange

La propuesta de maquillaje para las criadas es simple, que se enfoque en darles a los personajes un aspecto pálido, nervioso y ojeroso, como muestra de los debates internos que tiene cada hermana.

Maquillaje para ambas criadas


En el caso de La Señora se usarán colores claros, luminosos y brillantes, principalmente el blanco como símbolo de bondad, inocencia, pureza, virginidad, optimismo, perfección, inocencia. Y en un caso particular el color blanco hará referencia al “Luto de las Reinas” mencionado por las criadas, además que el uso excesivo de colores claros simboliza soledad, aislamiento y tristeza.
Al entrar en escena La Señora luce un vestido blanco sin mangas y con joyas en el cuello y muñecas. Tendrá una chaqueta blanca  o crema y una pashmina color crema y unos guantes negros de encaje.

      Dos propuestas de vestido                                        Chaqueta          Bufanda

Todo esto se lo irá quitando poco a poco en la escena para luego recuperarlos antes de salir. Para el calzado, La Señora utilizará unos tacones de color beige.

Guantes de Encaje            Tacones
El peinado de La Señora será un moño alto, que denote elegancia y superioridad y su maquillaje será tenue y luminoso para resaltar su perfección y santidad.

Distintas versiones del peinado
Maquillaje de La Señora

miércoles, 27 de noviembre de 2013

La Mímica, El Gesto y El Movimiento

La obra teatral “Las Criadas” tiene la particularidad de llevarse a cabo en un solo escenario, que representa la habitación del personaje La Señora. Esto conlleva a que los movimientos se efectúen en cuanto a entradas, salidas y acciones dentro de la habitación.

Por su parte, los gestos tienen que ver principalmente con la actitud de las manos, piernas, la cabeza y el cuerpo entero, con el fin de comunicar signos.

Asimismo, la mímica corresponde a las acciones faciales que forman parte de la expresión corporal y que permiten visualizar físicamente las emociones, sentimientos, y en muchos casos, las palabras que no se dicen verbalmente.

La obra comienza con Clara y Solange. Clara imita a La Señora, por lo que sus gestos deben ser similares a ella, de modo que si La Señora actúa con voz rígida y movimientos rápidos, Clara en su imitación también la representará de esa manera. Por su parte, Solange se representa a sí misma como criada, donde sus gestos se mantendrán fuertes y bruscos en casi toda la obra; debido a su condición de hermana mayor y a su fuerte temperamento.

En el momento que imita a La Señora, Clara mantiene una actitud prepotente y retadora, la cual lo demostrará con una postura rígida y una expresión de superioridad en su rostro. Por su parte, Solange mantendrá una actitud sumisa pero su mímica denotará fastidio por las exigencias de Clara y severidad durante sus respuestas.

En la escena inicial, Clara le pide a Solange que le busque un vestido junto con un par de zapatos mientras se mantiene sentada en la cama. Solange ayuda a Clara a colocarse el vestido pero cuando se inclina para acomodarle la cola, Clara, dando señales de asco, la empuja con un pie haciendo que Solange se caiga al piso. Comienzan a discutir, Clara mueve mucho las manos y Solange escupe sobre el vestido para luego darle un bofetón a Clara. Clara queda perpleja, sorprendida, mientras que Solange aprovecha su actitud para tomarla del cuello e intentar ahorcarla. Momentos más tarde suena el despertador y ambas vuelven a ser criadas nuevamente.

Clara como criada es una muchacha temperamental. Es la hermana menor de Solange, por lo que siente cierta inferioridad la cual la impulsará a actuar a veces de manera impulsiva y agresiva, solo para demostrar su fuerza ante su hermana. En este momento, Clara, agotada, se acuesta en la cama, mientras Solange preocupada intenta acomodar el desorden de la habitación. Paralelamente discutirán, siendo Clara más acusadora que Solange, en lo que suena el teléfono. Clara se levanta corriendo de la cama, lo coge con miedo, mientras Solange intenta acercar el oído al auricular pero su hermana no se lo permite, apartándola con las manos. Al terminar la conversación telefónica, Clara dejará el auricular descolgado y con manos temblorosas, su expresión facial será de preocupación; la de Solange será de intriga y posteriormente de pesimismo.

Clara se sentará en la cama nuevamente con una mirada perdida y pensativa, mientras Solange caminará en círculos hasta detenerse. Se arrodillará frente a Clara y la tomará por las manos, primero dulcemente y después con repugnancia, por lo que Clara se levantará molesta. Entonces, Solange nombra al Gardenal, Clara comenzará a cantar y a bailar de felicidad. Clara saldrá por la izquierda, mientras La Señora entrará por la derecha.

La Señora, al igual que Clara y Solange, tiene aires de bipolaridad. A pesar de tener un carácter rígido cuando da alguna orden a las criadas, su actitud pasará de un estado casi melodramático por el encarcelamiento de su esposo, a un rostro brillante y feliz cuando se entere de la buena noticia.

Al entrar La Señora, Solange cambia radicalmente su actitud y adopta la sumisión, colocando en varios momentos la cabeza gacha salvo aquellos en los que La Señora se dirige a ella. Toma el abrigo de La Señora, quien habla tristemente sobre su esposo y su desgracia, esta tiene gestos tristes al igual que débiles. En cambio, Solange se mantendrá firme en todo momento. En esta escena La Señora se sentará y levantará varias veces y luego se acercará a sus vestidos y los mirará tristemente por su desdicha. Entonces, le pide a Solange un cigarrillo, quien lo buscará pero luego tendrá que guardárselo en el bolsillo cuando La Señora la aparte con la mano, para seguir hablando.

Clara entra por la izquierda con una taza de Tila en la mano y Solange, cada vez que mire a Clara, será con los ojos bien abiertos, señalando con la boca o la cabeza hacia la Tila o a La Señora. Entre tanto, a Clara se le escapa decir que El Señor había llamado, la actitud de La Señora en ese momento cambia. Se levanta rápidamente y manda a Solange a pedir un Taxi para encontrarse con su esposo. Solange sale por la derecha. Clara le ofrece la Tila a La Señora repetidas veces pero esta no la toma y le habla mientras Clara hace gestos de querer irse, cuando La Señora no está mirándola. Finalmente La Señora sale por la derecha y entra Solange por la misma puerta.

La actitud de ambas será en un principio de reproche y se hablarán mirándose fijamente y moviendo los brazos en señal de acusación. Luego Clara comienza a actuar como La Señora. Enseguida entran en personaje y la discusión se vuelve más intensa. Solange toma fuertemente a Clara por el brazo mientras esta intenta huir y su expresión facial se convierte en la representación del miedo; luego la coge del cuello y la hace colocar de rodillas para darle un empujón final. Clara queda inmóvil cerca de la cama como si estuviera muerta. Solange enciende el cigarro que había guardado en el bolsillo pero tose y lo deja rápidamente. Su actitud es triunfante. En ese instante, entran el inspector y el policía. Solange sigue hablando, mientras ellos levantan a Clara por los hombros para llevársela. Se apagan las luces, Solange gritará  hacia el público moviendo los brazos, con mirada de superioridad. Se encienden las luces nuevamente, los policías no están y Clara se encuentra cerca de la cama donde había caído.

Clara se levanta como si nada hubiera pasado, como si todo hubiese sido una actuación para un público imaginario y continúa la conversación con Solange, aún imitando a La Señora. Se sienta sobre la cama y le pide a Solange la taza de Tila. Solange se queda inmóvil, observándola extrañada. Clara la obliga con un duro gesto y Solange finalmente se dirige a la mesa donde se encuentra la Tila y la acerca lentamente a Clara mientras repite como un robot lo que dice su hermana. Cuando está muy cerca vacila por última vez si darle o no la taza pero el rostro decidido y fuerte de Clara le hace darle la Tila. Clara cae muerta en la cama. Solange, mirando una vez más al público con mímica de rendición, se arrodillará levantando los brazos cruzándolos como si estuviera esposada. Se apagan las luces.

Importante es destacar que los personajes de “Las Criadas” no son estables sino más bien bipolares, dando como resultado una obra con una mímica muy expresiva, ya que debido a la rapidez de los cambios de humor se necesita una expresión igualmente destacada para permitir mayor entendimiento al público. La gestualidad de la misma forma tiende a ser pronunciada puesto que los elementos se mantienen inmóviles y la obra se basa en un solo lugar. Lo que implica igualmente que los movimientos en escena se lleven a cabo de un extremo a otro, incluyendo sentadas y levantadas de la silla, como en la cama; con el objetivo de darle mayor movilidad y ritmo a la obra.



miércoles, 6 de noviembre de 2013

La Palabra y El Tono

El sistema de signos creado por Tadeusz Kowzan es una estructura elaborada para medir la calidad de un espectáculo, según su autor es ahí donde el signo se manifiesta con mayor riqueza, variedad y densidad. Lo primero que involucra un texto pronunciado es la palabra, aquello que se quiere decir, lo que el actor lleva a la acción, aquel significado que nace de un hecho. Lo segundo es el tono: el vocabulario,  la intención; una palabra puede cambiar por la forma en que es pronunciada, un diálogo cambia según el contexto en el que se diga y según la persona que recibe el mensaje. El tono cambia según la cultura, el grado de vocabulario, los textos se pueden transformar por las variables que lo rodean y por el estado inconsciente de su receptor. 

Las criadas es una obra escrita por Jean Genet en 1947, el texto se basa principalmente en los diálogos entre dos hermanas que están a cargo de las labores domésticas de una casa elitesca, cuyas palabras son impulsadas por el resentimiento que sienten a su condición de vida pobre, lo que hace que escapen a un mundo irreal, se apropien del papel de La Señora y lo amolden a la forma en que ellas se expresarían si estuvieran en su lugar, para luego caer en la realidad de una situación que las hace miserable, cuyas líneas reflejan la envidia y el odio por el destino que viven y la necesidad de cambiarlo es la base que las lleva a planear su muerte de su ama.

“Y si no puedo escupir sobre alguien que me llama Clara, mis esputos van a ahogarme. Mi chorro de saliva es mi diadema de diamantes”. Es una frase de Solange en la que expresa como necesita escapar de su mundo de miseria e ir a un lugar donde ella pueda ser la que somete y no la sometida, pero no es suficiente y está inconforme porque nada es real.

La presencia de La señora las lleva a la sumisión producida por el miedo, la culpa y el intereses de verse beneficiadas por su amparo y las pronunciaciones finales de desesperación son nutridas por el miedo de perderlo todo y la impotencia de no encontrar ninguna solución conforme que resuelva sus tragedias da como consecuencia el suicidio de una de las criadas.

El autor hace énfasis en resaltar mediante el tono, las emociones e intenciones con las que los diálogos son expresados: En los momentos fraternales entre las criadas, la palabra es dicha de forma natural, sin represión; cuando las criadas fingen ser la señora, la intensión del texto se utiliza (en el caso de Clara) con un tono de superioridad al representar a La Señora y en el caso de Solange con resentimiento y reproche. Cuando ambas están en presencia de La Señora, el texto es pronunciado de forma sumisa, en los momentos de angustia entre las criadas la palabra se transforma en desesperación y violencia. En el caso de La Señora su diálogo se basa en palabras de lamento, dichas de forma exagerada y lastimera,  busca la lástima y la admiración a su falsa fortaleza y generosidad.

La obra también tiene un vocabulario rico y a veces difícil de entender para las generaciones más recientes; pero le añaden un criterio peculiar a los personajes que protagonizan la obra y dan un indicio cultural de la época. 



Jean Genet escribió una obra en la que el diálogo es la base de su estructura, el montaje de tal espectáculo gira alrededor de las emociones que se transmiten a través de sus líneas, las palabras son el hilo que contextualizan y llevan la historia y sus significados reflejan el carácter de sus personajes, sus reflexiones y actitudes.